¿Por qué una película tan esperada generó tanto rechazo? Este análisis desde la psicología del consumidor revela cómo las emociones, los símbolos culturales y las expectativas no gestionadas pueden convertir una historia clásica en un fracaso moderno.

Indice

• Las expectativas no cumplidas: El efecto anclaje en acción Cómo nuestras primeras impresiones condicionan la recepción de lo nuevo.
• Contexto histórico y social de «Blancanieves» Piel blanca, nobleza y la carga simbólica heredada de los cuentos de hadas.
• ¿Qué pasa cuando cambian radicalmente nuestras historias favoritas? La coherencia asociativa y su impacto emocional en el espectador.
• Cambiar sí, pero con arte y sutileza Cómo introducir cambios culturales sin provocar rechazo.
• El error en la investigación de mercado: ¿Quién es tu verdadero público? La importancia de identificar correctamente al consumidor real.
• ¿Cómo se pudieron evitar pérdidas económicas millonarias? El costo de no invertir en estudios del comportamiento del consumidor.
• ¿Qué podemos aprender? Cuentos, emociones y cultura: lo que está en juego al reinterpretar clásicos.

Seguramente te diste cuenta de que algo no salió bien con la reciente versión live-action de ‘Blancanieves y los 7 enanos’. ¿Por qué esta película generó tantas reacciones negativas? Desde mi experiencia como psicóloga del consumidor, quiero contarte por qué Disney pudo evitar este rechazo si tan solo hubieran prestado atención al comportamiento del consumidor.

Las expectativas no cumplidas: El efecto anclaje en acción

¿Recuerdas cuando pedías una hamburguesa que viste en una foto, y al recibirla no era lo que esperabas? Eso es el efecto anclaje en acción. Algo similar sucedió con ‘Blancanieves’. Aquellos que crecimos con los cuentos y las películas animadas tenemos una expectativa muy clara de cómo debería verse y sentirse esta historia. Daniel Kahneman, ganador del Nobel de Economía, explica este fenómeno (2011), señalando cómo nuestras percepciones iniciales condicionan profundamente nuestras opiniones futuras.

El nombre mismo, «Blancanieves», establece una imagen clara y específica en nuestra mente: una princesa extremadamente blanca, vinculada a la pureza y belleza tradicional europea. Cambiar drásticamente esta expectativa, sin preparar al público, generó confusión y decepción.

Contexto histórico y social de «Blancanieves»

Para entender mejor por qué la expectativa es tan fuerte, debemos considerar el contexto histórico del cuento original. En la Edad Media y durante varios siglos posteriores, la nobleza europea evitaba la exposición al sol para mantener su piel extremadamente pálida. Esta característica era símbolo de riqueza y estatus social elevado, ya que quienes trabajaban en el campo tenían piel más oscura debido a la exposición constante al sol.

Esta distinción llevó al término «sangre azul», utilizado para describir a la aristocracia porque las venas azuladas eran más visibles bajo la piel clara, indicando pureza de linaje y estatus privilegiado. Además, esta obsesión por la piel clara llevó al desarrollo de productos cosméticos para blanquear la piel, destacando aún más este ideal estético y social. Este simbolismo perdura hasta hoy en día en nuestros ideales occidentales de belleza, y se reflejó claramente en cuentos de hadas clásicos, incluido «Blancanieves».

¿Qué pasa cuando cambian radicalmente nuestras historias favoritas?

Las palabras importan mucho. Piensa en comprar un libro titulado «Recetas veganas fáciles» y descubrir que todas las recetas incluyen carne; la confusión y el disgusto serían inmediatos porque el título genera una expectativa muy clara. Lo mismo sucedió con esta película: su nombre, «Blancanieves», creó una expectativa específica que Disney no respetó, generando una fuerte ruptura en lo que llamamos coherencia asociativa.

Nuestro cerebro siempre busca conexiones entre lo nuevo y lo conocido. Cambios fundamentales, como la apariencia física tradicional de Blancanieves, generan esta ruptura asociativa, provocando un rechazo inmediato. Para entender mejor, imagina si «Cenicienta» no tuviera relación alguna con la pobreza o si «La Sirenita» no tuviera nada acuático; esto generaría rechazo porque se rompe la expectativa básica asociada a sus títulos.

Cambiar sí, pero con arte y sutileza

Aunque reconozco que es muy importante realizar cambios en cómo percibimos a las mujeres, a los hombres y sus relaciones, estos cambios deben ser graduales y sutiles. Kurt Lewin (1947) afirma que los cambios más efectivos son aquellos que se introducen poco a poco, facilitando la aceptación. Por ejemplo, incluir explícitamente la importancia del consentimiento en las relaciones amorosas podría haber generado aceptación sin romper abruptamente las expectativas base de la audiencia.

El error en la investigación de mercado: ¿Quién es tu verdadero público?

Cuando creamos contenido para niños, debemos tener en cuenta dos públicos objetivos: los niños y el adulto que los acompaña. Disney cometió un grave error al no identificar claramente a las madres millennials que crecieron con esta historia y que están atravesando un período de transición cultural respecto a las relaciones saludables. Un estudio adecuado desde la psicología social hubiera revelado claramente estas tensiones internas y prevenido decisiones que generaron tanta disonancia cognitiva.

¿Cómo se pudieron evitar pérdidas económicas millonarias?

Me parece muy curioso cómo una multinacional gasta tantos millones de dólares en producciones sin realizar un proceso de investigación adecuado sobre el consumidor. Estas pérdidas pudieron evitarse simplemente invirtiendo un poco más en estudiar profundamente al público objetivo. Comprender las expectativas psicológicas del consumidor es clave para evitar fracasos comerciales de este tipo.

Reflexión final: ¿Qué podemos aprender?

Quienes crecimos con estos cuentos no solo recordamos historias, sino también emociones, tardes en familia y aprendizajes sobre el amor y la amistad. Ignorar estas conexiones emocionales profundas puede salir muy caro. La experiencia social, la memoria colectiva y el contexto cultural son esenciales al realizar cualquier cambio significativo en productos tan queridos.